-
Haz textos cortos y sencillos
Porque el tiempo apremia y nos rebasa en todo momento, nuestra primera recomendación es que te asegures de que tu contenido sea apto para cualquier persona que se disponga a leerte. Utiliza lenguaje siempre y atractivo; asegurarnos de que el lector comprenda el contenido en una lectura rápida es la mejor estrategia para generar el alcance deseado en nuestro producto.
-
Ponte en los zapatos del usuario
¿A qué nos referimos con esto? No te asustes es muy simple. Ponerte en el lugar de tu cliente implica muchas cosas, pero la principal es que te anticipes a todas sus dudas y preguntas. Es importante entender que todas y cada una de nuestras definiciones están hechas para resolver las preguntas de nuestros clientes; por ello agrega la información vital de tu producto.
-
Busca un rasgo distintivo
El rasgo distintivo en tu oferta está directamente relacionado con la búsqueda de un factor diferenciador que posicione tu producto en el mercado. ¿Cómo encontrarlo? Pregúntate a partir de las características propias del producto cuál es la más innovadora. La diferencia puede estar en los componentes, materiales, beneficios o la experiencia que pueda generarle al usuario.
-
Persuade
La persuasión sólo puede lograrse de una forma: decidiendo una línea de comunicación coherente. Mantener una voz y un mensaje concreta en tu texto te darán credibilidad con tu cliente. Si no hay credibilidad no hay ventas. ¡Tómalo en cuenta!
-
Personaliza
Crear una identidad para nuestros textos y productos es indispensable para sobresalir en los medios digitales. Incluir símbolos de conexión y pertenencia para tu sector, hará que tus clientes no sólo se sientas identificados sino abrazados por tu marca. Recuerda la impresión que debe llevarse tu cliente no sólo debe ser impactante, sino duradera para que regrese.
Alejandrina Rodríguez
